El cáñamo es el nombre común que se le da al cannabis sativa s.p. usada desde la antigüedad con fines industriales, alimenticios, y terapéuticos. Es una planta milenaria que ha acompañado al desarrollo de la humanidad desde hace más de 12,000 años. En el antiguo Egipto se utilizaba para hacer papiro, tela, fabricar bálsamos y ungüentos medicinales, hacer alimentos con la harina proveniente de sus semillas, e incluso para la construcción, el cual servía como un maravilloso aislante, porque además protegía contra algunas plagas. Ha sido usado en Asia, América, África, e incluso Europa. En muchas culturas se le asociaba, o se le otorgaba una deidad. Se le dedicaban templos donde le rendían culto y sus sacerdotes, o sacerdotisas, eran especialistas en medicina.
Entre las muchas propiedades terapéuticas que se le conocen están ser: analgésico, antiinflamatorio, antihistamínico, antiestresante, neuroprotector, neuroregenerador, anticancerígeno, e incluso antiparasitario.